En varias partes del mundo, desde que inició la temporada invernal, se han registrado importantes repuntes en cuanto a casos de Covid se refiere, siendo China el principal protagonista de esta gran oleada que afortunadamente, no ha alcanzado los números registrados de hospitalizaciones y muertes que tuvimos al inicio de la pandemia.

Estados Unidos no se queda muy atrás en el tema, ya que desde hace unas semanas ha habido un aumento gradual de casos y de pacientes que han necesitado ayuda hospitalaria, todo gracias a una nueva variante de Covid, surgida de Ómicron.

El pasado viernes, expertos de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) dieron a conocer que estiman que la variante XBB.1.5 es la dominante en EE.UU. en las últimas 4 semanas, siendo actualmente el causante del 41% de las nuevas infecciones.

“Desde hace unos meses, no habíamos visto una variante que despegara a esa velocidad”, afirmó Pavitra Roychoudhury, directora de secuenciación de Covid-19 en el laboratorio de Virología de la Facultad de Medicina de la Universidad de Washington.

Virólogos y epidemiólogos advierten que la variante XBB.1.5 tiene las características necesarias para impulsar una nueva oleada importante de coronavirus en EE.UU., aunque se desconoce qué magnitud tendría.

De igual manera, según el rastreo hecho a la variante, todo parece indicar que XBB.1.5 surgió en el país. Se detectó por primera vez en Nueva York y Connecticut a finales de octubre, según GISAID, una iniciativa mundial para catalogar y rastrear variantes del coronavirus.

Asimismo, sería producto de la recombinación de 2 subvariantes, la BA.2, la cual causó una oleada de casos en abril de 2022, y de la subvariante XBB.

También se sabe que la XBB.1.5 posee la misma capacidad de la evasión de anticuerpos que la de la subvariante XBB.1, lo que significa que tiene el potencial de escapar a la protección de las vacunas y las infecciones anteriores. También es resistente a todos los tratamientos actuales con anticuerpos, incluido Evusheld.

Además de su gran capacidad de evasión inmunitaria, XBB.1.5 tiene una mutación clave en el sitio 486, que le permite unirse más estrechamente a ACE2, la puerta que el virus utiliza para entrar en nuestras células.

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