Las autoridades han identificado a Mauricio García como el sospechoso del tiroteo masivo que tuvo lugar en un centro comercial de Allen, Texas. Según fuentes policiales, García, de 33 años, actuó solo durante el crimen y murió tras ser abatido por un oficial.
La base de datos de Texas Online Private Security reveló que García se sometió a un entrenamiento de dominio de armas de fuego como parte de su trabajo como guardia de seguridad comisionado. García había trabajado para al menos tres empresas de seguridad y recibió capacitación en seguridad de Nivel II y Nivel III, que incluye entrenamiento con armas de fuego.
Durante el tiroteo, García portaba un arma estilo AR-15, y las autoridades encontraron numerosas armas en su vehículo. Los vecinos describen a García como un hombre tranquilo y reservado que nunca mostró signos de ser alguien sospechoso de una masacre.