A raíz de un desgarrador incendio forestal que arrasó Maui, Hawaii, el camino para identificar a las víctimas sigue envuelto en incertidumbre.
A medida que los perros rastreadores de cadáveres recorren diligentemente los restos carbonizados, se prevé que aumente el número de muertos confirmado de casi 100, lo que genera dudas sobre el plazo para la identificación precisa de las víctimas.
Si bien el gobernador de Hawaii, Josh Green, reconoce que podría llevar hasta 10 días determinar un número de muertos más preciso, los expertos advierten que el proceso de identificación de los fallecidos podría extenderse durante varios meses o incluso años.
Dichos expertos, que hablaron con la cadena BBC, mencionaron la enormidad de la destrucción y las diversas condiciones de los restos plantean importantes desafíos para los especialistas en identificación de víctimas.
En medio de la devastación, los expertos mencionaron a la cadena que enfrentarán desafíos multifacéticos, desde recuperar muestras adecuadas para el análisis de ADN hasta crear bases de datos integrales para facilitar las comparaciones.
La destrucción de registros dentales y documentación médica complica aún más los métodos científicos.
Chris Milroy, profesor de patología y medicina de laboratorio, destacó a la BBC que las altas temperaturas pueden haber borrado las huellas dactilares y otros posibles identificadores.
“Dado que las metodologías científicas se enfrentan a limitaciones, la identificación visual por parte de los familiares y el descubrimiento de pertenencias personales cerca de los restos se consideran poco fiables”, recoge la cadena de noticias.
Si bien la asistencia invaluable de perros de cadáveres especialmente entrenados ayuda en la búsqueda, las altas temperaturas y la necesidad de intervalos de descanso afectan su eficiencia.
Aunque los obstáculos enfrentados en Hawaii son distintivos, el laborioso proceso de identificación de víctimas después de eventos catastróficos es un desafío recurrente.
